SEGUNDO TRABAJO INTEGRADOR
En esta segunda unidad nos centramos en el hilo conductor de todo lo que
hemos visto en este primer apartado, dialogamos nuestros puntos de vista sobre
diferentes temas muy interesantes, temas aclamados por la sociedad, temas con
diferentes perspectivas, temas donde el problema central es la forma en que la
cultura condiciona nuestro modo de ver el mundo, aquí surgen las siguientes
preguntas:
¿Qué es conocer? ¿Qué es el saber? ¿Qué es creer?
Pudimos notar como a pesar de que distintos autores como José Ortega y
Gasset, Luis Villoro y Pablo Fernández Christlieb hablen sobre la misma palabra
cada uno tiene diferentes ideas y nuevas cosas que aportar.
Primero abordare con los conceptos vistos en el bloque iniciando con las
ideas habladas con Gasset en su lectura Ideas y creencias donde menciona que
las creencias son básicamente realidades inminentes, realidades que muchas
veces damos por hecho de tal manera que ni siquiera pensamos en ellas.
"no son
ideas que tenemos, sino ideas que somos" (Gasset, 1940)
Por otro lado habla de las ideas, aquí menciona que las ideas provienen
de tu pensamiento, de tu razón o simplemente de la adopción de alguna idea de
alguien más.
"Toda
nuestra "vida intelectual" es secundaria a nuestra vida real o
auténtica y representa a esta solo una dimensión virtual o imaginaria." (Gasset, 1940)
Por último habla de las dudas, que ocurren cuando dos creencias se
contraponen de manera antagónica o una creencia cambia o varía. En esta circunstancia
las personas se dirigen a la ambigüedad.
Después se leyó el texto “creer, saber, Conocer” de Luis Villoro en el
cual el autor delimito el creer del saber y como estos conceptos cambian al
analizarlos desde distintos puntos relacionándolos como conceptos epistémicos. También
analiza un conjunto de nociones fundamentales en la teoría del conocimiento y
en el estudio de las relaciones entre pensamiento y las formas de dominación.
Analiza conceptos como “creencia”, “saber” y “conocimiento”,
Villoro delimita el “creer” como “tener un enunciado por verdadero” o
“tener un hecho por existente”. Además menciona que se puede llegar a creer por
alguna de estas tres razones: Antecedentes, motivos o razones. También
distingue dos tipos de creencias: las opiniones de las que podemos dar razones
y que podríamos abandonar si éstas dejaran de convencernos y las creencias
propiamente dichas, aquellas de las que no solemos dar razones explícitas pero
están supuestas en todas las opiniones que tenemos.
Para Villoro conocer a diferencia del saber, es personal e
intransferible, podemos denominarlo también “conocimiento personal”.
Por último se leyó un artículo del autor Pablo Fernández Christlieb
llamado “la psicología de las cosas y otros objetos” donde menciona como es que
a lo largo de la historia de la Edad Media hasta la Edad Moderna, la cultura y
la experiencia ayudaron al ser humano a construir nociones históricas de las
cosas que poco a poco han ido formando parte de las mismas personas.
Él nos habla de objetos , todo lo imaginable, cosas e ideas que nos
percatamos son objetos porque están en oposición y crean resistencia es decir,
son algo fuera de nosotros, son separados, esto es similar a lo visto en la
primera unidad, y en esta época ( la edad media) había menos objetos que los
hay actualmente, no había un estudio detallado de las cosas y por la cultura y
sociedad de la época, todo era sagrado, todo era incuestionable y magino ni
verificable ni totalmente real ni imaginario, por su etimología el sentir y el
percibir eran básicamente lo mismo en estas épocas, pero avanzando en la
epistemología sentir y percibir se diferencian en el sentido de que para
percibir se necesita un objeto distinto e independiente a quien percibe, en
pocas palabras sientes los objetos ligados a ti pero percibes los ajenos, es
aquí como sigue el avance social que llega hasta nuestros días, donde en los
últimos siglos hemos creado más objetos que nunca antes, y donde nuestro modo
más aceptado de interpretar la realidad la ciencia ( al menos en la cultura
occidental) se basa en el analizar objetos percibidos distanciados del
observador. Es ahora donde se ve la sensación y la percepción como básicamente
lo mismo excepto en la percepción y la simplicidad extrema de su objeto como
dice en el texto “es la diferencia entre caliente y la estufa que algún
descuidado dejo prendida”
Aquí vemos cómo es que el autor de Creer, Saber y Conocer, Luis Villoro
junto con Pablo Fernández relacionan estas ideas de las que habla Christlieb,
debido a que son una forma de saber y conocer de un tema o una percepción de la
realidad. “El conocer es asegurar en
razones” (Luis Villoro). Donde Pablo muestra cómo es que el concepto de objeto
se fue desarrollando hasta establecer una relación de encantamiento.
En el día a día estamos como personas saturadas de información, datos,
números, métricas, creencias, incluso sistematizadas por lo que me lleva a una
reflexión formulada por mi compañera Mariana Arpio, quién afirma que es difícil
separar las creencias de los saberes, es casi
imposible. “No podemos tener la certeza de todo lo que sucede en el mundo,
siempre habrá misterios en los que tendremos que creer y tener fe, pues no
podemos saberlo todo y comprobar todo. Cuando se trata de psicología, por más
que los positivistas lo deseen, es imposible crear una psicología absolutamente
exacta, libre de subjetividades pues las personas somos un conjunto de
incoherencias y sinrazones, la prueba de esto es que no existe una corriente
psicológica capaz de predecir el comportamiento de una forma cien por ciento
exacta, que sea capaz de dar un tratamiento terapéutico que no tenga margen de
error, que englobe todas las dimensiones humanas y que pueda entender todas las
incongruencias y misterios humanos.”
Y así mismo mi compañera aborda el tema haciendo mención que en México
creemos saber, se dice creer porque dentro de nuestro país hay mecanismos que
ayudan a medir el nivel de educación, que, cabe mencionar no trae consigo
buenos resultados en la mayoría de las ocasiones, pero, solemos creer que a
pesar de eso el estudiar en una universidad nos brinda ciertos conocimientos y
aunque es cierto, ¿Qué pasa cuando hay la necesidad de trabajar o competir con
alguien que su sabiduría es más grande? A pesar de que creíamos ser los
mejores, siempre habrá una línea de medición muy grande que puede no muchas
veces favorecernos.
Particularmente creo que las ideas se aprenden y se van consiguiendo a
través de la vida y las experiencias que nos van sucediendo. En cambio las
creencias son parte nuestra, es la parte instintiva de nuestro propio ser. Las
creencias sirven para reaccionar rápido y vienen con nosotros y nos cargan a
nosotros y a base de las creencias es como vemos las ideas y experimentamos el
mundo de nuestro rededor.
Las ideas sumadas con las
creencias son lo que crean el conocimiento a partir de las experiencias o de lo
aprendido. El conocimiento aprendido por otras personas tiene el problema de
que ese conocimiento tiene diferente visión desde la perspectiva del creador de
dicho conocimiento, así que cuando uno lo aprende debe de tener cuidado ya que
cada mente percibe el mundo diferente gracias a las creencias personales. Y
esto trae consigo que no existe el conocimiento universal, todo es personal a
sus propias creencias.
Por otro lado me he dado cuenta cómo es que la historia con el paso del
tiempo cambia todos estos conceptos se vuelven más profundos y creo en un
futuro donde superemos algunos errores que tenemos hoy en día.
En mi caso a lo largo de mi vida, de mis etapas estudiantiles me he
percatado cómo todos estos conceptos se han ido modificando en cada una de las
etapas que he vivido. Estudio Ingeniería en Empresas de Servicios y he
aprendido que no podemos dar por hecho o interpretar un concepto de la misma
manera que alguna otra persona lo hace, y no únicamente un concepto, sino un
proceso, una análisis, un proyecto, una idea y una acción.
Esto lo relaciono con la teoría de Platón, ya que para el conocimiento
tiene como objeto encontrar una definición inequívoca al saber de todas las
cosas.
El saber más elevado será entonces el conocimiento de lo universal y el
más bajo será el conocimiento de lo particular. Esta doctrina supone una
separación irreconciliable entre el saber Universal y el mundo real, pero para
Platón este concepto de lo Universal no implica una forma abstracta, sino que a
cada uno de estos conocimientos universales le corresponde una realidad
concreta.
Para Platón son las ideas las que se pueden conocer en forma accesible,
pero no niega realidad al mundo de las cosas. Sin embargo, Platón no pudo
determinar cuál es la relación que existe entre lo particular y lo universal.
Platón supone que el conocimiento de lo real se puede alcanzar de un
modo absoluto, pero no sucede lo mismo con las cosas del mundo sensible, que
para él es ilusorio y está sujeto al cambio. Razón por la que no pueden ser
objeto de conocimiento científico.
Porque el objeto de conocimiento debe ser inmodificable, estable y
permanente como para lograr su definición con claridad.
El conocimiento se logra mediante juicios sobre conceptos universales y
no sobre particulares y solo pueden ser verdaderos los juicios sobre lo
permanente y estable. Ni la percepción sensible ni la creencia verdadera pueden
ser objeto de conocimiento.
Bibliografías:
- José Ortega y Gasset. (1940). Ideas y Creencias, . Marzo de 2016, de Revista de Occidente en Alianza
- Villoro, L. (1982). Creer, saber, conocer. México, D.F.: Siglo veintiuno editores.
- Fernández, P. (Diciembre,2002). “Psicología de las cosas y otros objetos” . Psic. Soc. Revista Internacional de Psicología Social.
Está padre tu ensayo, tomaré algunas frases que me gustaron para el mío. Veo que has relacionado los textos con los aprendizajes en la universidad y que te das cuenta de que las ideas y las creencias no son una cosa estática, como tal vez pudiera entenderse al leer a Ortega y Gaset o a Villoro, quienes no hacen énfasis en que las ideas cambian, las creencias se transforman. Gracias por leerme!
ResponderEliminarMuy buen trabajo Roberto.
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