jueves, 31 de marzo de 2016

CREER, SABER, CONOCER

SEGUNDO TRABAJO INTEGRADOR 

En esta segunda unidad nos centramos en el hilo conductor de todo lo que hemos visto en este primer apartado, dialogamos nuestros puntos de vista sobre diferentes temas muy interesantes, temas aclamados por la sociedad, temas con diferentes perspectivas, temas donde el problema central es la forma en que la cultura condiciona nuestro modo de ver el mundo, aquí surgen las siguientes preguntas:
¿Qué es conocer? ¿Qué es el saber? ¿Qué es creer?        
Pudimos notar como a pesar de que distintos autores como José Ortega y Gasset, Luis Villoro y Pablo Fernández Christlieb hablen sobre la misma palabra cada uno tiene diferentes ideas y nuevas cosas que aportar.

Primero abordare con los conceptos vistos en el bloque iniciando con las ideas habladas con Gasset en su lectura Ideas y creencias donde menciona que las creencias son básicamente realidades inminentes, realidades que muchas veces damos por hecho de tal manera que ni siquiera pensamos en ellas.
"no son ideas que tenemos, sino ideas que somos" (Gasset, 1940)
Por otro lado habla de las ideas, aquí menciona que las ideas provienen de tu pensamiento, de tu razón o simplemente de la adopción de alguna idea de alguien más.
"Toda nuestra "vida intelectual" es secundaria a nuestra vida real o auténtica y representa a esta solo una dimensión virtual o imaginaria." (Gasset, 1940)
Por último habla de las dudas, que ocurren cuando dos creencias se contraponen de manera antagónica o una creencia cambia o varía. En esta circunstancia las personas se dirigen a la ambigüedad.

Después se leyó el texto “creer, saber, Conocer” de Luis Villoro en el cual el autor delimito el creer del saber y como estos conceptos cambian al analizarlos desde distintos puntos relacionándolos como conceptos epistémicos.  También analiza un conjunto de nociones fundamentales en la teoría del conocimiento y en el estudio de las relaciones entre pensamiento y las formas de dominación. Analiza conceptos como “creencia”, “saber” y “conocimiento”, 

Villoro delimita el “creer” como “tener un enunciado por verdadero” o “tener un hecho por existente”. Además menciona que se puede llegar a creer por alguna de estas tres razones: Antecedentes, motivos o razones. También distingue dos tipos de creencias: las opiniones de las que podemos dar razones y que podríamos abandonar si éstas dejaran de convencernos y las creencias propiamente dichas, aquellas de las que no solemos dar razones explícitas pero están supuestas en todas las opiniones que tenemos.

Para Villoro conocer a diferencia del saber, es personal e intransferible, podemos denominarlo también “conocimiento personal”.

Por último se leyó un artículo del autor Pablo Fernández Christlieb llamado “la psicología de las cosas y otros objetos” donde menciona como es que a lo largo de la historia de la Edad Media hasta la Edad Moderna, la cultura y la experiencia ayudaron al ser humano a construir nociones históricas de las cosas que poco a poco han ido formando parte de las mismas personas.

Él nos habla de objetos , todo lo imaginable, cosas e ideas que nos percatamos son objetos porque están en oposición y crean resistencia es decir, son algo fuera de nosotros, son separados, esto es similar a lo visto en la primera unidad, y en esta época ( la edad media) había menos objetos que los hay actualmente, no había un estudio detallado de las cosas y por la cultura y sociedad de la época, todo era sagrado, todo era incuestionable y magino ni verificable ni totalmente real ni imaginario, por su etimología el sentir y el percibir eran básicamente lo mismo en estas épocas, pero avanzando en la epistemología sentir y percibir se diferencian en el sentido de que para percibir se necesita un objeto distinto e independiente a quien percibe, en pocas palabras sientes los objetos ligados a ti pero percibes los ajenos, es aquí como sigue el avance social que llega hasta nuestros días, donde en los últimos siglos hemos creado más objetos que nunca antes, y donde nuestro modo más aceptado de interpretar la realidad la ciencia ( al menos en la cultura occidental) se basa en el analizar objetos percibidos distanciados del observador. Es ahora donde se ve la sensación y la percepción como básicamente lo mismo excepto en la percepción y la simplicidad extrema de su objeto como dice en el texto “es la diferencia entre caliente y la estufa que algún descuidado dejo prendida”

Aquí vemos cómo es que el autor de Creer, Saber y Conocer, Luis Villoro junto con Pablo Fernández relacionan estas ideas de las que habla Christlieb, debido a que son una forma de saber y conocer de un tema o una percepción de la realidad.  “El conocer es asegurar en razones” (Luis Villoro). Donde Pablo muestra cómo es que el concepto de objeto se fue desarrollando hasta establecer una relación de encantamiento.

En el día a día estamos como personas saturadas de información, datos, números, métricas, creencias, incluso sistematizadas por lo que me lleva a una reflexión formulada por mi compañera Mariana Arpio, quién afirma que es difícil separar las creencias de los saberes, es casi imposible. “No podemos tener la certeza de todo lo que sucede en el mundo, siempre habrá misterios en los que tendremos que creer y tener fe, pues no podemos saberlo todo y comprobar todo. Cuando se trata de psicología, por más que los positivistas lo deseen, es imposible crear una psicología absolutamente exacta, libre de subjetividades pues las personas somos un conjunto de incoherencias y sinrazones, la prueba de esto es que no existe una corriente psicológica capaz de predecir el comportamiento de una forma cien por ciento exacta, que sea capaz de dar un tratamiento terapéutico que no tenga margen de error, que englobe todas las dimensiones humanas y que pueda entender todas las incongruencias y misterios humanos.”


Y así mismo mi compañera aborda el tema haciendo mención que en México creemos saber, se dice creer porque dentro de nuestro país hay mecanismos que ayudan a medir el nivel de educación, que, cabe mencionar no trae consigo buenos resultados en la mayoría de las ocasiones, pero, solemos creer que a pesar de eso el estudiar en una universidad nos brinda ciertos conocimientos y aunque es cierto, ¿Qué pasa cuando hay la necesidad de trabajar o competir con alguien que su sabiduría es más grande? A pesar de que creíamos ser los mejores, siempre habrá una línea de medición muy grande que puede no muchas veces favorecernos.

Particularmente creo que las ideas se aprenden y se van consiguiendo a través de la vida y las experiencias que nos van sucediendo. En cambio las creencias son parte nuestra, es la parte instintiva de nuestro propio ser. Las creencias sirven para reaccionar rápido y vienen con nosotros y nos cargan a nosotros y a base de las creencias es como vemos las ideas y experimentamos el mundo de nuestro rededor.

 Las ideas sumadas con las creencias son lo que crean el conocimiento a partir de las experiencias o de lo aprendido. El conocimiento aprendido por otras personas tiene el problema de que ese conocimiento tiene diferente visión desde la perspectiva del creador de dicho conocimiento, así que cuando uno lo aprende debe de tener cuidado ya que cada mente percibe el mundo diferente gracias a las creencias personales. Y esto trae consigo que no existe el conocimiento universal, todo es personal a sus propias creencias.

Por otro lado me he dado cuenta cómo es que la historia con el paso del tiempo cambia todos estos conceptos se vuelven más profundos y creo en un futuro donde superemos algunos errores que tenemos hoy en día.

En mi caso a lo largo de mi vida, de mis etapas estudiantiles me he percatado cómo todos estos conceptos se han ido modificando en cada una de las etapas que he vivido. Estudio Ingeniería en Empresas de Servicios y he aprendido que no podemos dar por hecho o interpretar un concepto de la misma manera que alguna otra persona lo hace, y no únicamente un concepto, sino un proceso, una análisis, un proyecto, una idea y una acción.

Esto lo relaciono con la teoría de Platón, ya que para el conocimiento tiene como objeto encontrar una definición inequívoca al saber de todas las cosas.
El saber más elevado será entonces el conocimiento de lo universal y el más bajo será el conocimiento de lo particular. Esta doctrina supone una separación irreconciliable entre el saber Universal y el mundo real, pero para Platón este concepto de lo Universal no implica una forma abstracta, sino que a cada uno de estos conocimientos universales le corresponde una realidad concreta.
Para Platón son las ideas las que se pueden conocer en forma accesible, pero no niega realidad al mundo de las cosas. Sin embargo, Platón no pudo determinar cuál es la relación que existe entre lo particular y lo universal.
Platón supone que el conocimiento de lo real se puede alcanzar de un modo absoluto, pero no sucede lo mismo con las cosas del mundo sensible, que para él es ilusorio y está sujeto al cambio. Razón por la que no pueden ser objeto de conocimiento científico.

Porque el objeto de conocimiento debe ser inmodificable, estable y permanente como para lograr su definición con claridad.
El conocimiento se logra mediante juicios sobre conceptos universales y no sobre particulares y solo pueden ser verdaderos los juicios sobre lo permanente y estable. Ni la percepción sensible ni la creencia verdadera pueden ser objeto de conocimiento.

Bibliografías:
  • José Ortega y Gasset. (1940). Ideas y Creencias, . Marzo de 2016, de Revista de Occidente en Alianza 
  • Villoro, L. (1982). Creer, saber, conocer. México, D.F.: Siglo veintiuno editores.
  • Fernández, P. (Diciembre,2002). “Psicología de las cosas y otros objetos” . Psic. Soc. Revista Internacional de Psicología Social.

    jueves, 17 de marzo de 2016

    CONOCIMIENTO: ¿PROCESO PSÍQUICO O COLECTIVO?

    Esta semana leímos el texto Psicología colectiva de las cosas y otros objetos, de Fernández Christlieb.

    En este texto, Christlieb como a lo largo de la historia de la Edad Media hasta la Edad Moderna, la cultura y la experiencia ayudaron al ser humano a construir nociones históricas de las cosas que poco a poco han ido formando parte de las mismas personas.

    A principios de la Edad Media, Christlieb declara que el único color que existía, era el rojo, sin embargo cabe mencionar que a finales del siglo XX, una computadora era capaz de producir hasta 60,000 colores.


    Christlieb hace mención que en la Edad Media todo se veía de este color en específico, debido a que simbolizaba la valentía, honor, entre otras cosas. Años después (1000-1500), comienzan a aparecer otro tipo de objetos que serán parte de la vida del humano, como por ejemplo los muebles. Poco a poco se van inventando nuevos objetos como el cofre y la cómoda y aparecen nuevos conceptos como el vacío, donde se sentía que se quedaba un espacio o un hueco que había que llenar de objetos, de ahí que a partir de 1500 se registraron una gran cantidad de inventos de cualquier tipo.

    Posteriormente surge la necesidad de la clasificación, donde las personas ya tenían la idea de que todo debía de ser separado o categorizado para poner orden sobre todos los nuevos objetos que se habían creado a lo largo del tiempo, es por eso que se empieza a clasificar en los ópticos, luego los acústicos, los olfativos, en cuarto lugar los gustativos y por último los táctiles.


    En el siglo XIX, los seres humanos establecen una relación epistemológica de encantamiento con los objetos, se fascinan de ellos y se convierten en sus grandes pasiones, tienen la creencia de que son maravillosos y fijan una meta de tener los más que pueda. En el siglo XX esto es un tanto diferente, pues durante estos años ya no se crearon tantos objetos, sino que se le dio más importancia a la información, datos, números específicos de los objetos, en lugar de fijarse tanto en cómo se veían o cómo es que se percibían en la realidad.

    El autor de Creer, Saber y Conocer, Luis Villoro junto con Pablo Fernández relacionan estas ideas de las que habla Christlieb, debido a que son una forma de saber y conocer de un tema o una percepción de la realidad.  “El conocer es asegurar en razones” (Luis Villoro). Donde Pablo muestra cómo es que el concepto de objeto se fue desarrollando hasta establecer una relación de encantamiento.

    Fernández, P. (2002). Psicología colectiva de las cosas y otros objetosPsic. Soc. Revista Internacional De Psicología 

    domingo, 13 de marzo de 2016

    LUIS VILLORO: CREER, SABER, CONOCER

    En su libro Creer, saber, conocer, Luis Villoro analiza un conjunto de nociones fundamentales en la teoría del conocimiento y en el estudio de las relaciones entre pensamiento y las formas de dominación. Analiza conceptos como “creencia”, “saber” y “conocimiento”, relacionándolos como conceptos epistémicos.

    Para Villoro, “creer” significara “tener un enunciado por verdadero” o “tener un hecho por existente”. Define a la creencia como “un estado disposicional adquirido, que causa un conjunto coherente de respuestas y que está determinado por un objeto o situación objetiva aprehendidos” además, considera el saber y el conocer como formas de creencia, es decir, “estados disposicionales adquiridos” que orientan la práctica del sujeto ante el mundo. Saber y conocer, formas fundamentales del conocimiento en general, se distinguirían de la creencia por ser estados disposicionales que estarían determinados por lo que realmente existe y no por lo que simplemente creemos que existe.

    ¿Por qué se cree? Villoro responde de tres maneras:

    • Por antecedentes, que son aquellos hechos sociales, culturales, psicológicos que colocan a los sujetos en posición de aprehender.
    • Por motivos, que es todo aquello que mueve o induce a una persona a actuar de cierta manera para lograr un fin.
    • Por razones, es decir, por argumentos que pudieran explicar lógicamente la creencia.


    Villoro distingue dos tipos de creencias:
    •      Aquélla que Ortega llama “ideas”, que son las opiniones de las que podemos dar razones y que podríamos abandonar si éstas dejaran de convencernos.
    •        Creencias propiamente dichas, aquellas de las que no solemos dar razones explícitas pero están supuestas en todas las opiniones que tenemos.


    ¿Qué es conocer? Para Villoro conocer un objeto implica sabe algo de él aunque no    necesariamente sea a la inversa, para   conocer  algo   es  precise   tener o haber  tenido  una  experiencia   personal  y directa,  haber  estado en contacto, estar "familiarizado"   con ello. 

     Pero entonces ¿Qué es saber? Según Villoro saber en cambio, no implica tener una experiencia directa, menciona que el conocimiento se adquiere mediante impresiones inmediatas. Por decirlo de otra manera conocer es integrar en una unidad varias experiencias parciales de un objeto.


    El conocer, a diferencia del saber, es personal e intransferible, podemos denominarlo también “conocimiento personal”.




    Villoro, Luis. (2008). Creer, saber, conocer. 18ª ed.  México. Siglo XXI

    domingo, 6 de marzo de 2016

    Ideas y creencias

    Esta semana hablaremos sobre una lectura muy interesante titulada  Ideas y creencias, de José Ortega y Gasset. 

    José Ortega y Gasset fue un filósofo español que vivió entre finales del siglo XVII y mediados del siglo XVIII. 
    En su libro "Ideas y Creencias"[Gasset, J. (1940). Capítulos del I al III. Buenos Aires, Argentina: Espasa-Calpe argentina, s. a.] José Ortega nos hace notar la diferencia entre los términos idea y creencia, separando sus pensamientos en tres conceptos básicos. Creencias, ideas y dudas.

    Creencias
    Las creencias son, en resumen, realidades inminentes. Realidades que das por hecho a tal grado que ni siquiera piensas en ellas. Son cosas de tu subconsciente de las que cambiando una sola de ellas tu vida cambiaría radicalmente. "no son ideas que tenemos, sino ideas que somos" dice el autor.
    Un ejemplo de estas puede ser pensar meter tu mano a una llama. Puedes pensar si meterla o no, pero nunca considerarás ni pondrás en duda por un segundo si el fuego esta caliente o no tu crees completamente en esto.

    Ideas
    Las ideas provienen de tu pensamiento, tu razón o de la adopción de ideas de alguien más.
    Este es el mundo donde nosotros pensamos que vivimos, pero solo es eso, es lo que pensamos, nuestra realidad se encuentra en el mundo de las creencias.
    "Toda nuestra "vida intelectual" es secundaria a nuestra vida real o auténtica y representa a esta solo una dimensión virtual o imaginaria."
    Las ideas son cuestionables y debatibles existen algunas más exactas y mejor fundamentadas con teorías y experimentos. A esto llamamos ciencia y es el mayor exponente de nuestra capacidad de pensamiento consciente y lo que sucede con ellas es que cada nueva teoría reemplaza a la anterior haciendo más evidente la cuestión secundaria e imaginaria de estas.


    Dudas
    Las dudas ocurren cuando dos creencias se contraponen de manera antagónica o una creencia cambia o varía. En estas circunstancias las personas son arrojadas a una realidad tan real como las creencias pero que es "ambigua, bicéfala, inestable y sobre la cual no sabemos a qué atenernos ni que hacer". En este tipo de situaciones es cuando el hombre se pone a pensar, buscando alguna forma de salir de esta duda el intelecto es la herramienta más próxima con la que el hombre cuenta y no le queda más que "inventar" algo para poder salir de ella.



    Particularmente creo que las ideas se aprenden y se van consiguiendo a través de la vida y las experiencias que nos van sucediendo. En cambio las creencias son parte nuestra, es la parte instintiva de nuestro propio ser. Las creencias sirven para reaccionar rápido y vienen con nosotros y nos cargan a nosotros y a base de las creencias es como vemos las ideas y experimentamos el mundo de nuestro rededor. 

     Las ideas sumadas con las creencias son lo que crean el conocimiento a partir de las experiencias o de lo aprendido. El conocimiento aprendido por otras personas tiene el problema de que ese conocimiento tiene diferente visión desde la perspectiva del creador de dicho conocimiento, así que cuando uno lo aprende debe de tener cuidado ya que cada mente percibe el mundo diferente gracias a las creencias personales. Y esto trae consigo que no existe el conocimiento universal, todo es personal a sus propias creencias.